POWER ELECTRONICS Aspar Team - Entrevista Aleix Espargaró - 11/12/12 'JORGE ME HA AYUDADO MUCHO A MADURAR, APORTÁNDOME CALMA Y CONFIANZA' Aleix Espargaró tiene 23 años y lleva nueve dentro del panorama mundialista, desde su debut en la temporada 2004. Pese a su cortad edad ha pasado por todas las categorías del Mundial. Su cara de niño, su frescura y su jovialidad lo han convertido en uno de los pilotos más queridos y carismáticos del grupo de MotoGP. Inquieto como pocos, este año ha encontrado en el POWER ELECTRONICS Aspar Team la calma necesaria para eclosionar como piloto, y crecer como persona. En esta entrevista muestra su cara más íntima, desvela algunos de sus secretos más curiosos, y repasa los mejores momentos de una temporada gloriosa, en la que ha logrado el título de mejor piloto CRT. Les han dado, a los hermanos Espargaró, el premio Shoya Tomizawa por su envidiable sintonía. . . Es un orgullo, Pol y yo estamos siempre juntos y mostrando nuestra devoción el uno por el otro, no para ganar premios, sino porque así lo sentimos. Pero aun así, siempre es un orgullo que nos reconozcan por actitudes como la nuestra. Es algo natural y bonito, desde pequeños siempre estuvimos muy unidos. ¿No le descentra ver la carrera de su hermano y luego competir usted? No me descentra, pero evidentemente no es el mejor método para templar los ánimos. Cuando la carrera de mi hermano no va bien, intento mantenerme firme para no perder la concentración a pesar del cabreo. Y cuando hace una buena carrera, que normalmente es así, salgo mucho más enchufado a la prueba de MotoGP. Salta a la vista que ya no le quedan uñas. . . Cierto (risas). Es la única forma que tengo de canalizar los nervios en los momentos de las carreras. Me como casi hasta los dedos. ¿Por qué lleva el 41? Por Youichi Ui, fue mi ídolo cuando empecé a crecer en el motociclismo. Además, casualmente en aquel momento compartíamos representante. Youichi se portó muy bien conmigo, me regaló monos, cascos. . . Desde aquella época me hice incondicional suyo, y empecé a competir con el número 41 hasta hoy. ¿Dónde nace la afición por el rosa? Entre los pilotos es muy generalizado el uso del amarillo y el naranja fluorescentes. Personalmente siempre me ha gustado hacer cosas distintas, el rosa no lo usaba nadie así que me lancé. Es un color vistoso, que me encanta, y sobre todo que da un punto de exclusividad. Digamos que poca gente se atreve a usarlo, y a mí me gusta mucho. ¿Por qué le llaman 'Pippo'? Al nacer, mi padre me regaló un hipopótamo de peluche con el que dormía, y le pusieron ese nombre. Mis amigos empezaron a llamarme 'Pippo' y al final los más allegados continuaron llamándome así hasta hoy. Todavía conservo el peluche original. Al final de la temporada pasada anunció su futura boda. ¿No es un poco pronto para casarse? No creo que se trate de un momento, sino más bien de encontrar a la persona adecuada. Llevo mucho tiempo con mi pareja, nos compenetramos muy bien y nos apetece dar este paso. Hemos vivido infinidad de cosas juntos, creo que es el momento adecuado. Además en mi caso, como piloto, no llevo el mismo ritmo de vida que un chico de mi edad. 'Espargarins' es uno de los clubes de fans de pilotos más famoso y antiguo de España, ¿cómo lo siente? Lo he dicho mil veces y no me canso de repetirlo, es un auténtico orgullo para nosotros tener un club de admiradores como los 'Espargarins'. Lo bonito es que nos siguen desde mucho antes de que empezáramos a competir en el Mundial. Nos han seguido por Cataluña, Albacete, Jerez, Jarama. . . Todo ello antes de que fuéramos pilotos mundialistas. Y luego han venido a muchísimos grandes premios a animarnos, sin importar las distancias. Se agradece muchísimo, es un orgullo tanto para Pol como para mí. Además, este año es el décimo aniversario. Después de nueve años en el Mundial, por fin una bonita recompensa. ¿A qué sabe este título de CRT? Estoy muy feliz, porque hemos cumplido el objetivo que nos marcamos al inicio de la temporada pasada. Estoy satisfecho porque hemos logrado ganar a nuestro compañero de equipo con las mismas armas. Randy De Puniet es un grandísimo piloto y lo ha demostrado durante toda la temporada. Considero que hemos completado una temporada sublime, más que por el título estoy contento porque he disfrutado de un año magnífico. 'Aspar' apuntó a principio de temporada que usted era un piloto con gran potencial y a tener en cuenta. El tiempo le ha dado la razón. . . El invierno pasado no sabía si correría en Moto2 o en MotoGP, pero sí tenía claro que sería en el POWER ELECTRONICS Aspar Team, para mí ese hecho ya era un orgullo. Desde el primer momento hubo un despliegue a mi alrededor increíble, con un equipo de mecánicos muy experimentado y con los técnicos de Aprilia siempre pendientes. Sé que Jorge tenía muchas esperanzas puestas en mí, aquello supuso un poco de presión, pero supimos gestionarla perfectamente. Se le percibe mucho más maduro. ¿En qué ha madurado Aleix Espargaró durante la temporada 2012? Jorge me ha ayudado mucho en este aspecto. Me ha aportado calma y confianza, ambas muy importantes para un piloto, y también me ha enseñado a serenarme. Básicamente esos han sido los cambios más significativos, y que en definitiva me han permitido mejorar tanto como piloto. Parece que el trío de 'A' -Aspar Team, Aleix Espargaró y ART- ha dado buen rendimiento. . . Este año la 'A' es la letra más fiable, no ha fallado (risas). Al inicio del año pasado, cuando todavía no sabía con qué moto correría, estaba tranquilo. Porque tenía claro que estando en el POWER ELECTRONICS Aspar Team, la moto que me dieran sería competitiva. Es un equipo puntero, que siempre apuesta por el mejor material. Ahora queda patente que acertamos eligiendo la ART. Ha sido la mejor moto con diferencia, pero gracias principalmente al equipo, porque esta moto en otras manos no ha sido tan competitiva. ¿Cuál es el punto de inflexión de la pasada temporada? ¿Cuándo creyó realmente que podía ganar en CRT? Siendo sincero, en Jerez no merecía ganar como gané. Mi compañero abandonó y aquello me dio mucha moral, el hecho de verme delante. A partir de aquella carrera cambié mi modo de pensar, y comencé a creer que debíamos trabajar más todavía, porque todo era posible. Desde entonces empecé a soltarme, y conseguí rodar más rápido y más consistente. Sin restar méritos, en el trío Asia-Pacífico dio una impresión de ligera superioridad. . . Randy y yo llegamos a la recta final con la situación muy igualada. Tenía claro que cualquier despiste o contratiempo me podía hacer perder varios puntos, y un puesto en la clasificación general. Ahí comprendí que si quería llevarme el título de CRT, tendría que ganar tres de las cuatro últimas carreras, para llegar a Valencia con una tranquilidad relativa. Todo pasaba por completar un buen trío, tanto el equipo como yo nos concentramos muchísimo, pensamos minuciosamente nuestras estrategias a nivel de motores. Supimos economizar a la hora de montar unos u otros, y la verdad es que salió todo a pedir de boca. ¿En qué carrera ha disfrutado más? En Montmeló. Correr en MotoGP siempre es especial, si es en el circuito de casa más todavía, además el fin de semana se resolvió fabulosamente. Conseguimos rodar muy rápido durante los entrenamientos y el domingo fuimos los mejores CRT. Luego, sin duda, también la de Valencia, cuando realmente pudimos saborear lo que habíamos logrado. Además vinieron muchos amigos a compartir aquel momento mágico conmigo, así que fue una alegría total. La lluvia en la parrilla nos produjo muchos nervios, cuando crucé la meta sentí una liberación tremenda. ¿Esperaba ganar nueve carreras en CRT? Sinceramente, antes de descubrir cuál sería mi compañero de equipo no estaba convencido, pero tenía claro que el que antes encontrara el equilibrio con los nuevos prototipos dominaría con bastante claridad. En el momento que supe que Randy sería mi compañero de equipo intuí que la situación se complicaría. Es un gran piloto y sabía que me pondría las cosas muy difíciles. Conforme avanzaba el año cogí confianza y me fui descarando. A partir de ahí mi objetivo consistió en ganar el mayor número de carreras. ¿Cómo es la ART 2012 y qué vio de la 2013 en Valencia, aunque pudo rodar poco? Lo mejor de la ART sin duda es el chasis. Es una moto ágil, que te permite girar muchísimo. También es posible frenar con ella hasta el último momento, incluso en la misma curva, ese es su punto fuerte, y gracias al cual nos emparejábamos con algunas MotoGP. El chasis 2013 solo lo pudimos probar en condiciones de agua en Valencia, no extrajimos muchas conclusiones. ¿Cómo va a celebrar durante el invierno este gran año? Solo quiero estar en casa con mi familia, tranquilo, descansando y cargando pilas. El 2014 será un año importante, que vendrá marcado por los cambios. Así que en 2013 hay que estar muy atentos para completar un buen año, y preparar a conciencia el siguiente. |